Es la toxina botulínica tipo 1A la que utilizamos con fines estéticos. Las inyecciones de bótox se conocen principalmente por su capacidad para reducir la apariencia de algunas arrugas faciales.
También se usan para tratar problemas como espasmos de cuello (distonía cervical), transpiración excesiva (hiperhidrosis), vejiga hiperactiva y ojo vago. Las inyecciones de bótox también quizás ayuden a prevenir las migrañas crónicas.
Las inyecciones de bótox suelen aplicarse en el consultorio del médico. El médico utiliza una aguja delgada para inyectar pequeñas cantidades de toxina botulínica en la piel o los músculos.
La cantidad de inyecciones necesaria depende de muchos factores, como el tamaño del área que se trate.
- No frotes, ni des masajes en el área tratada.
- Evita bajar la cabeza por 48 horas. Esto puede ayudar a evitar que la toxina se disemine a un área diferente.
- Podrás volver a tus actividades normales inmediatamente después que el doctor lo autorice.
Para tu orientación en la consulta contamos con un programa de simulación y modelado virtual, de tecnología suiza: Crisalix.
La tecnología de simulación 3D ayuda al paciente a ver las características, desarrollo y alcance en el resultado posible, de su procedimiento estético o reconstructivo.
Es un simple proceso, donde el Dr. Emmanuel tomará fotografías del paciente para hacer la simulación virtual.
Luego, en consulta, el Dr. Emmanuel realizará el modelado virtual según las características del procedimiento desarrollado para orientar tus expectativas e inquietudes.
